El día en que las hadas

Floria Herrero

En mi casa todos tenemos que tener relación con la literatura.

Mis hermanos y yo, nos criamos bajo esa dictadura y no importa como intercedan por nosotros tíos y abuelos, aquí la obligación es bíblica, y no es solo por los nombres, es esa: Leer.

 Y no hay negociaciones. 

Hace ya tiempo que pa, dejó de leerme, ahora yo soy quién escoge mis libros, y Ariel cuando no anda con esa chiquita que disque novios, a veces me lee.    Es un buen cuenta cuentos mi hermano. Y no es un reclamo, es solo que a veces quiero que se ponga a hablar conmigo como con Ariel y Moi, ni quiero que Moi y Ari se la pasen diciendome que todo me pasa pasa por ser el pequeño, así que voy a hacer mi mejor esfuerzo, pero ojo, no quiero que esos dos me molesten después.

 No sé que va hacer papá con nosotros al final, porque Moi quiere ser periodista, Ariel escritor y yo, pues cuando este seguro lo apunto, lo que quiere decir que por ahora no tenemos más futuro que vivir de la caridad de papá y espero que eso nos dure su rato; pero por lo menos él no pelea con nosotros como lo hacen los tíos con mis primos porque lo de ellos era la música, y... digamos que desde hace algún tiempo la abuela usa el Sax de Carlos para guardar sus agujas de tejer....

Este me lo regaló una amiga de papá, y como mis hermanos están metidos en la onda de las tareas literarias, a mi no me queda de otra si es que quiero ir también con ellos a Costa Rica, aunque conociendolos en el aeropuerto, a penas lleguemos, pasaré el tercero en discordia por todas partes y ni me van a pelar...

Este es el segundo libro que leo de esta señora.

El otro se llamaba Abuelas que Vuelan, y Ariel y yo, hicimos una obra de muñequitos en la escuela con ella.  Creo que tiene poesía también, pero no ha tenido mucha suerte con eso, porque lo suyo es la literatura infantil, y dice mi tío que cuando uno reconoce sus zapatos se los pone y sale corriendo. 

Yo caigo dentro de ese rumbo. 

Nosotros los niños estamos siempre esperando que nos cuenten cosas que nos entretengan y a veces salen con cada cosa, que ay Dios mío: me quedo a la orilla de la cama pensando si dormir será lo conveniente o salir a dejar perdido el libro, eso me ha pasado mucho con otro libro de otra escritoria costarricense, bueno, yo estaba con Floria Herrero.

   Según pude averiguar en internet, ella pertenece a dos de las familias más importantes de la cultura costarricense, es hija de una pintora y sobrina de Julieta Pinto, que también es una escritora de las buenas de allá. Bueno, eso dice Ari...

Hasta hace unos años, como si los tuviera todos, yo también tenía una colección de Hadas que estaban escondidas en otros libros de cuentos, y en un baulito que era de mamá. Por eso sé, que las Hadas son en realidad todo aquello que nos propongamos como niños ser...

A veces, después de ver televión soy muy bien un Hado tramposo que le roba las galletas a Nana y después dice que fue el perro que fue el perro perdido de los vecinos, otras veces esa misma hada es la que me dice que no haga la tarea porque se me perdió el libro, por cierto que eso si es cierto, pero con este libro descubrí que hay muchos tipos de hadas: las hay grandes como una casa o pequeñitas como un  alfiler, que trabajan en una escuela cosa que yo nunca haría, porque no le tengo paciencia a otros niños Y SOY NIÑO, ahora imaginense de grande, me puede dar dolor de estomago de solo pensarlo y las hay como la escritora del libro, porque ella también es un hada, porque me dijo Ari que eso son los escritores de cuentos infantiles, hadas mágicas que no necesitan de otro bosque que el de las palabras... (Disculpen si a veces no pongo tildes tengo muy mal español escrito, pero buena redaccion general, dice mi profe)

El libro me gustó; por eso, porque lo voy a llevar a escena con mis amigos, hice un breve abstract:  porque ahora estoy encargado de mi prima, Sheila, y le estoy contando los cuentos como me los contaba Ari que en esa materia, la de re-contar cuentos tiene lo suyo.

Asi que otro día le seguiré a la historia esta, los demas detalles iran saliendo en el camino.

Yo solo queria decir lo que se me ocurrió, y es que el publico infantil es el más dificil, y ella logró atraparnos a los dos, porque les voy a decir, esa niña ´me va volver loco, pero pone atención cuando le narro, se dice así, los cuentos. A ella también le gustan.

Hasta luego.  

Para La Coleccionista de Espejos, Aaron Aguilar Costa.

  

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Floria Herrero Pinto nació en San José, Costa Rica.
Es licenciada en Artes Plásticas de la Universidad de Costa Rica.
Ha publicado varios libros de literatura infantil.
En l979 recibió el premio Carmen Lyra por su obra El Planeta Verde.
En l987 ganó un concurso de poesía de la Fundación Givré, en Buenos Aires Argentina.
En 1991 obtuvo el primer lugar en el concurso de Literatura Juvenil Esperante auspiciado por la universidad de Northeastern Illinois, con su libro No se Detiene el Tiempo.
En 1992 publicó su primer libro de poesía para adultos, Galope de Luces, que fue traducido al inglés por la profesora Liz Lambert Martén.
En 1999  Abuelas que Vuelan, Editorial Farben -Norma..
Otros de sus libros son: El Duende Bambú, El Robot Enamorado, Los Pasos del Sueño, La Peña Bruja.
Es fundadora del Instituto de Literatura Infantil para Niños y Jóvenes.

O FLHjORIA HEetyuRO PyuntO (Esta parte me quedó así porque estamos peleandonos ek teclado, esa niña y yo...)))




NO


1. No se detiene el tiempo: 1997
2. El lugar verdadero: 2004

CU

1. El planeta verde: 1979
2. El duende
3. Bambú
4. El robot enamorado
5. La peña Bruja
6. Frente al tiempo: 2002
7. El duende Bambú: 2003
8. El Planeta Verde: 2004
9. Abuelas que vuelan: 2006
10. El día en que las hadas: 2010


POESÍA


1. Los pasos del sueño: 1989
2. Galope de luces: 1992

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