domingo, 3 de abril de 2011

Telemaco


Jessica Clark

Cal-El y yo teniamos una apuesta.

Los dos porque estamos en la edad del pedo, dice mi madre convenimos en escoger un tema de ciencia ficción de los muchos que abundan por internet, porque como buenos vagos un día nos cansamos de nuestros jueguitos virtuales, y de sucedernos el turno de puntaje en world treak. Nuestra apuesta consistía en ver si cuando me convitiera en hija de una presidiaria mi vida seria diferente. Él ganó porque a mamá solo la condenaron a llevar terapia para aprender la manejar la ira por instarlarle el disco duro de mi laptop a un pobre indefenso ladrón que nos asaltó a la salida del small de acá arriba.

El caso es que no considero que haya sido una perdida; pues igual que él yo también tengo un papá que si pudiera ya me hubiese comprado una sección de la biblioteca nacional para que me entretuviera, solo que al contrario de él tengo una madre a la que Anancy le tendría horror: hay que ver lo que he oído, leído y visto y ahí si el PANI en mute...

Este libro es de Ciencia Ficción. Costarricense.

Vamos a ver si aprendí bien a hacer lecturas, porque si ma y pa son exigentes nada más esperen a esperen a llevar un cursito con T.Del:

Telemaco, no es el hijo de Ulises, sino una nave espacial, especial, en la que nueve extranjeros, lo digo porque por ser creados de forma que podríamos llamar in vitro, reuniendo todas las condiciones mejores de los seres humanos, pero que sin embargo; se han sentido solos porque no se parecen a nadie ni nadie los comprende...

El viaje empieza en una noche oscurecida por los recuerdos infantiles cuando cuando un adolescente, podía no, descubre que no calza en ninguna parte porque escucha una voz que le habla de cosas que debería haber olvidado; junto a él un grupo de piezas dispersas también adolescentes pensantes, sienten lo mismo, y como es de un comic bastante llamativo de lo que estamos hablando; siendo adolescentes, no podía esperarse menos, toman la decisión de partir en busca de... ¿qué será, un padre, un vinculo común, o simplemente saber qué somos en un mundo hecho para otros a imagen de sus propios deseos?

Para mí, mi papá es importante. Ma, a veces. Ellos no tenían ni uno ni otro; al menos no en un mundo convencional; solo a Amos Thaly, por eso parten para en busca de encontrarse, ser parte de algo distinto a un simple encuentro y selección de genes, porque la soledad, es un vaso a medio llenar, dice Ludovina en la novela de T.Del, por eso, después de cansarse de ese compañero que nunca se llena un día se roban un barco, el Telemaco: la ficción aquí es un elemento interesante porque es llegar a casa con la mente cansada y poner los pies calientes en el piso frío; cuando uno estornuda piensa una en que ha olvidado algo en la escuela: en mi opinión la ciencia ficción no es tan desconocida para las mujeres, si pensamos que Emilia Macaya, Diez días para el fin del siglo, dio este paso mucho antes.

Eso dice Graice, que es a la que más les gusta este tipo de relato. Nosotros, los de este tiempo pensamos de otra manera, nuestro mundo es el de luces y colores de las consolas espaciales de nuestros juegos que al igual que con Pau algún día se volverán realidad.

Este libro no fue ganador de un premio ni mencionado siquiera que ya es bastante, porque probablemente cayó en manos uno de jóvenes viejos que todo lo saben y piensan en sus amigos y son capaces de meter ruido porque no les ponen atención, o tal vez los jurados fueron uno de aquellos que piensan que los educados para escribir sin talento son los más idóneos para ganar porque de nuevo los amigos cuentan. Lo que si sé es que este es un buen libro, nos gusta a nosotros los jugadores electrónicos que no llegamos a la categoría de buenos amigos de nadie ni estaríamos dispuestos a hacer feo porque otros no están de acuerdo con que la literatura tiene que romper esquemas pero no haciendo pleitos defendiendo el trabajo de otros al mismo estilo de los caballeros peleando amores entre ellos.

De los libros que he leído últimamente, este me gusta porque además de que no es de lectura obligatoria, ese va a ser mi mundo dentro de poco...

Para La Coleccionista de Espejos:

Cat(herinne) CK

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Art Palabra:

Jessica Clark C.

Publicista y guionista.

*Los Salvajes (antología de cuentos) 2005

*Telémaco (novela) 2007.

*Posibles futuros; Cuentos de ciencia ficción (antología de cuentos) 2009.

3 comentarios:

la coleccionista dijo...

Bien Cat, recuerda poner atención a las tildes

Del

la coleccionista dijo...

Qué es luna llena y todos quieren un pedazo de mi!! Tumben la vara pq el no solo el Télemaco va zarpar al cielo, por un lado, y CAT, ya que a veces me quieres y otras no, más tarde pa no hacer escenas en internet hablamos!!!!

la coleccionista dijo...

Hola Cat

Me alegra mucho que una niña de tu edad se ocupe de asunto tan trascendental como es el arte. Generalmente los muchachos solamente leen la literatura obligatoria que les asignan en el colegio. Te felicito tambien por la agudeza de algunas de tus observaciones sin pasar por alto la fina ironia con que dices algunas cosas. Vas por muy buen camino. Espero que sigas siempre por ese mismo sendero

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