A solicitud de Karla Araya, quién hace unos meses coordinó la presentación de la tesis doctoral de Dorothy Mosby, sobre la obra de los escritores afro-costarricenses, viajamos Delia y yo, a San Ramón: pues la cuarta edición de ...la lluvia es una piel... se haría esta vez en la sede de Occidente de la U.CR.
Y San Ramón cuna de poetas, intelectuales, agricultores, políticos, y siempre progresista, nos recibió con gesto cálido y cara sonriente.
La presentación fue hecha por Mayra Herra que como la hormiguita, o mejor todavía, como la araña silenciosa de Walt Whitman que labora con diligencia y sin aspavientos para lograr que las cosas se hagan y que se hagan bien; desplegó un maravilloso cúmulo de conocimientos en que hizo reconocimiento de los detalles identificativos de la poesía de Delia, como lo son la identidad, los ancestros, los orígenes comunes y el innegable posicionamiento de la autora dentro del tejido cultural actual.
Y junto a Mayra, Karla Araya y su esposo, Gustavo Córdoba, fotógrafo diligente, mediante aportes significativos hicieron de la presentación todo un éxito: gradualmente se fue llenando la sala de conferencias de la biblioteca. Nos honraron con su presencia, los estudiantes de la Carrera de Bachillerato en la Enseñanza del Castellano y Literatura y el Bachillerato en la Enseñanza del Inglés.
Tanto los comentarios enriquecedores de Elisa Li; profesora de Inglés, Marisol Patiño, Óscar Montanaro, Olga Martha Mena, y de los estudiantes nos sumergieron dentro de una atmósfera muy, pero muy calurosa…
Motivo que me hacer pensar en que es inmensamente más importante este tipo de reconocimiento y que nunca podré terminar de sentir agradecimiento más profundo por estos estímulos que nacen de personas tan especiales con el quehacer cultural nacional
Gracias a Karla Araya, a su esposo, a doña Mayra, y a todos y cada uno de los presentes
Para La Coleccionista de Espejos: Franklin Perry P.
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